Hay varias características que tenemos que tener en
cuenta sobre el combustible cuando se trata del sistema de inyección de un
motor a diesel:
Agua en
el combustible
El agua en el combustible es el peor enemigo del
sistema de inyección. Las partículas están presentes en el combustible siempre
que no se tenga un manejo adecuado del combustible o las condiciones de
almacenamiento no sean apropiadas.
Un sistema de inyección moderno puede quedar destruido
con tan solo trabajar un par de horas con diesel contaminado con agua.
El combustible diesel es miscible en agua, es decir,
que se puede mezclar homogéneamente con agua en cualquier proporción:
Entera o libre (visible)
Mezclada (combustible con una apariencia opaca o con
burbujas)
Disuelta (solo hasta enfriar el diesel hasta su punto
niebla se puede observar el agua)
Tener en
cuenta
- Cambiar el filtro de combustible regularmente y utilizar filtros de buena calidad.
- Instalar un filtro adicional con separador de agua con tazón visible o sensor de agua.
- Incluir en el mantenimiento del motor el lavado de los tanques de combustible.
Los filtros son para atrapar las partículas e impedir
que lleguen al sistema de inyección; es más barato cambiar filtros que reparar
el sistema de inyección.
Partículas
o suciedad en el combustible
Las partículas ocasionan desgaste mecánico de las
piezas debido a sus pequeñas tolerancias ocasionando un funcionamiento
inadecuado y hasta pueden tapar las toberas de los inyectores.
Índice de
cetano
El índice de cetano es un número para medir la
calidad del diesel. A mayor número cetano, mejor inflamabilidad. Si el
número de cetano es demasiado bajo, la combustión es inadecuada y da lugar a
ruido excesivo, aumento de las emisiones, reducción en el rendimiento y aumento
de la fatiga del motor.
La idea
es que el encendido del combustible se produzca inmediatamente después de
iniciada la inyección, porque si no sucede así se comenzará a acumular
combustible pulverizado y cuando se inflame la masa acumulada lo hará de forma
explosiva, sometiendo al pistón a
verdaderos martillazos.
En los motores diesel actuales se considera un combustible con un número
cetano 55 de mínimo.
Contenido
de azufre
El azufre es un
elemento natural del petróleo crudo. El rendimiento y la vida
útil del motor se relacionan con la cantidad de azufre en el combustible. Un
contenido de azufre de más del 0,5% puede acortar grandemente la vida útil del
motor.
El azufre
en el combustible reacciona durante la combustión y se combina con el agua
para formar ácido sulfúrico. Si estos vapores de ácidos se condensan,
atacan químicamente las superficies de metal de las guías de válvula, de las
camisas de los cilindros y pueden afectar los cojinetes.
Cuando se producen
daños debido a la presencia de azufre en el combustible, habrá pocos cambios en
la potencia del motor. Pero, con frecuencia, el desgaste corrosivo traerá
consigo un consumo excesivo de aceite y escape de gases, causando la
reconstrucción prematura del motor.
La
temperatura del motor es un factor importante en el proceso de
la formación de ácido sulfúrico. Los óxidos de azufre deben
combinarse con agua para formar ácido sulfúrico.
Un motor que opera a una temperatura de 87 Cº en la salida del agua de la camisa, generalmente, no permitirá la formación de ácido sulfúrico, debido a que está operando por encima del "punto de niebla" de condensación del ácido sulfúrico.
Un motor que opera a una temperatura de 87 Cº en la salida del agua de la camisa, generalmente, no permitirá la formación de ácido sulfúrico, debido a que está operando por encima del "punto de niebla" de condensación del ácido sulfúrico.
Esto
significa que un motor no debe funcionar enfriado en exceso. Si el
aceite de lubricación no tiene suficiente reserva de alcalinidad (Número de
Base Total) para neutralizar el ácido, las camisas se pueden desgastar diez
veces más rápido.
Lubricidad
La lubricidad es una consideración importante para
evitar el desgaste de las piezas del sistema de inyección; el principal
problema es que al reducir el contenido de azufre para reducir emisiones
dañinas para el ambiente, también se reduce la lubricidad del combustible.
Síntomas de contaminación del combustible
· Consumo de combustible muy alto
· Reemplazo frecuente de los filtros o filtros bloqueados
· Limpieza frecuente y reemplazo de inyectores
· Pérdida de potencia
· Desgaste prematuro de los aros
· Consumo de aceite por aros dañados
· Humo negro en los gases de escape
Si
advierte alguno de estos síntomas, su motor está trabajando con combustible incorrecto que afecta:
· El desempeño del lubricante
· La vida útil del motor
· Los tiempos de parada por reparación
· Los costos de repuestos y mantenimiento
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